martes, 15 de octubre de 2019

¿Qué son y para qué sirven los alimentos funcionales?



Hay conceptos en el sector de la nutrición que por diversas razones no son tan conocidos entre las personas, incluso entre aquellas que buscan estrategias para el control del peso o métodos para mejorar sus hábitos de vida. En ese orden de ideas, al solicitar los pedidos batidos Herbalife, hay varios conceptos que se suelen enunciar, como por ejemplo los alimentos funcionales.


¿Qué son los alimentos funcionales?


En términos generales, al mencionar los alimentos funcionales, se hace referencia a un tipo de productos que por sus características y propiedades, pueden ayudar con la mejora en la salud de las personas, aunque no es que sean imprescindibles o extraordinarios. Por otro lado, se los denomina esta manera por ser alimentos que intervienen en un proceso en el cuerpo, por su composición en vitaminas, fibra, antioxidantes y similares, lo que puede significar que se presenten distintos efectos beneficiosos para procesos fisiológicos del cuerpo.



Tal y como se menciona desde el primer párrafo, no es que sean alimentos indispensables o necesarios como tal para ser incluidos en el plan de alimentación de todas las personas, pero por sus características pueden ofrecer beneficios para la salud cuando son consumidos dentro de un marco estilo de vida saludable.

Más allá de lo anterior, son alimentos que no cuentan con una capacidad directa para curar o prevenir enfermedades. Así mismo, se resaltan sus propiedades en el mundo moderno, como consecuencia de ciertas necesidades que han ido surgiendo con el paso del tiempo gracias al sistema sanitario, pues se busca una reducción en la incidencia de determinadas enfermedades como la osteoporosis.

¿Cuáles son los métodos para conseguir un alimento funcional?


  • Cuando se elimina un componente que tiene un efecto perjudicial y en este caso se puede hacer referencia a una proteína alergénica para dar un ejemplo. Algunos de los casos típicos a este respecto son las leches infantiles e incluso la leche sin lactosa.
  • Si se aumenta la concentración de un componente que hace parte naturalmente el alimento, buscando así que se consiga un efecto determinado. Un ejemplo es la elevación en la concentración de ácidos grasos omega 3 en ciertos productos.
  • En los casos en que se añade un componente que no está presente pero que tiene un efecto beneficioso. Aquí se pueden mencionar los pre y probióticos.
  • Cuando un componente es reemplazado porque su ingesta saltar y quizá tiene un efecto nocivo para el cuerpo. En este procedimiento se utiliza otro componente que sí tiene un efecto beneficioso para el cuerpo. Una opción es que se disminuye el nivel de azúcar y se incremente el de fibra.
  • El aumento en la biodisponibilidad o estabilidad de uno de los compuestos en el alimento para que así se dé un efecto beneficioso o se pueda reducir el riesgo de sufrir una enfermedad.

Diferencias entre un alimento funcional y un alimento enriquece


Para empezar, un alimento enriquecido es uno que aporta uno o varios nutrientes que son reconocidos por ser deficitarios en una población. Por otro lado, el concepto de alimento funcional responde a uno que ha sido modificado para que pueda poseer un efecto que sea positivo sobre la salud.

Los ingredientes funcionales que más se utilizan


  • Las proteínas de la leche o hidrolizados.
  • Probióticos, prebióticos y sin-bióticos. Son un tipo de ingredientes funcionales que se consumen con mucha frecuencia entre la población, siendo presentados como una mezcla de lactobacilos y bifidobacterias. Sobre los prebióticos hay que mencionar que son un tipo de ingrediente que no es digerible y que afecta de modo beneficioso al huésped gracias a una estimulación selectiva para que puedan crecer bacterias en el colon.
  • Los lípidos de origen lácteo, al igual que de otro origen, donde un ejemplo son los ácidos omega 3.
  • La fibra dietética. Es una materia vegetal que es muy resistente a la digestión y absorción por el aparato digestivo. Naturalmente se encuentra en los vegetales, frutas, legumbres y cereales. El consumo de la misma está relacionado con una mejoría en el tránsito intestinal y con un menor riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles.
  • Jalea real, calcio y antioxidantes.

¿Cuáles son los objetivos de los alimentos funcionales?


A grandes rasgos, se usan para cuidar y promover la salud cardiovascular, mantener la calidad de los huesos, promover el buen funcionamiento del sistema digestivo y finalmente mejorar el sistema inmunológico.

¿Son necesarios los alimentos funcionales?


Una vez se conocen la existencia de este tipo de alimentos en el mercado, muchas personas se hacen la pregunta por si los mismos son necesarios dentro de una dieta o plan de alimentación cualquiera. En ese sentido, aunque puede surgir una preocupación por querer prevenir determinadas enfermedades como las patologías cardiovasculares o la osteoporosis, la realidad es que los alimentos funcionales no son alimentos imprescindibles.

Para ser mucho más claros con el argumento anterior, los alimentos funcionales logran contribuir con una mejora la salud de la persona, pero si se piensa en las consecuencias positivas que acarrea su consumo, no es que vayan a suponer un avance tan gigantesco como el mercadeo lo quiere hacer ver.



En muchas ocasiones, el simple motivo que un ingrediente sea agregado a un alimento no va a querer significar que el mismo esté biodisponible. Para dar un ejemplo mucho más claro de la anterior situación, el calcio que hace parte de la leche se absorbe en un 30%, de todos modos, nunca se va a poder garantizar que esta absorción pueda hacer la misma cuando el calcio se le añade a un zumo.

Para conseguir dar una respuesta a la anterior pregunta, es necesario que un ensayo clínico sea realizado con cada uno de los productos en concreto sobre los que se tenga dudas o se quiera precisar. Sin embargo, el consumo de los alimentos funcionales no es dañino, sino que se suele recomendar. Por lo tanto, se puede decir que se trata de una muy buena idea que se incorporen estos alimentos como parte de la alimentación habitual, aunque siendo muy conscientes que son productos con ciertas limitaciones y que en muchos casos se van a ver atravesados por las estrategias de mercadeo que distorsionan su efecto real en el organismo.

Asimismo, los alimentos funcionales que tienen una mayor proyección, son todos aquellos en los que se utilizan probióticos como una parte fundamental para que estos productos adquieran la noción de funcionalidad. En términos generales, las investigaciones se enfocan cada vez más en el trabajo con cepas de microorganismos, buscando de esta manera una comprensión mucho más amplia de la importancia de la flora bacteriana en la salud de los seres humanos.

Sobre las consecuencias de un equilibrio que sea correcto en la microflora, se puede pensar en un asunto tan clave como la probabilidad de desarrollar enfermedades complejas. Además, en los últimos años, el crecimiento de determinadas cepas de bacterias en el colon se ha ido relacionando paulatinamente con la ganancia muscular. Finalmente, van a suponer una de las primeras barreras para sistema inmunitario, así que su diversidad es un factor sumamente relevante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario