3 estrategias para evitar ganar peso al envejecer

Una de las realidades que todas las personas deben aceptar en algún momento de su vida, es que el paso de los años hace que se gane peso e inclusive que sea cada vez más difícil para el cuerpo el poder eliminar esos kilogramos de más.


Es pensando en ello e incluso evitando considerar variantes como la nutrición deportiva Herbalife que en este caso nos concentramos en algunas de las claves para no ganar peso con los años, resaltando desde el inicio que siempre será clave mantenerse activo y aumentar la ingesta de alimentos ricos en flavonoides.

Hacer ejercicio con regularidad

Cuando se quiere evitar subir de peso y además se lo plantea como una estrategia con la que se quieren evitar las consecuencias de la edad, el movimiento para el cuerpo es fundamental. No se olvide que el metabolismo se hace cada vez más lento con los años y por eso mismo es que se acumulan los kilos.

En conclusión, es clave que se realice alguna actividad física, la cual inclusive puede ser moderada, siempre y cuando se trate de una práctica constante en la vida. Así mismo en términos de salud su organismo se lo agradecerá.

Mantener la mente activa

Del mismo modo en que ocurre con el cuerpo, la mente también precisa de estar activa, ya que con ello se beneficia el cuerpo en muchos sentidos. Estrategias tan sencillas como incluir una lectura todos los días o disfrutar de juegos como los crucigramas, sudokus o el ajedrez son soluciones válidas.

Con técnicas como las descritas se va a sostener un estímulo para varias áreas del cerebro, lo que agilizará la memoria y también la concentración. En la medida en que esto ocurra se va a controlar la depresión y el estrés, dos factores que pueden estar relacionados con que se coma de una manera desproporcionada.

Cuidarse de las dietas bajas en calorías

Uno de los problemas centrales de las dietas que son bajas en calorías es que disminuyen de manera importante el ritmo del metabolismo, situación que se da por la búsqueda del cuerpo en cuanto a conservar la energía y con ello se consumen aún menos calorías.

En definitiva la clave en estos casos es aprender a personalizar la dieta al máximo para que se ajuste a las propias necesidades del cuerpo y en la medida de lo posible no decantarse por los planes alimenticios que son restrictivos.